Consejos útiles:
- Los productos milagro no son medicamentos. Hay que resaltar que la legislación española dispone un riguroso sistema de registro de Medicamentos: Deben llevar un número de siete dígitos -Código Nacional de Medicamentos. El control previo sanitario queda patente por las siglas C.P.S.
- Hay que desconfiar de las grandes promesas. No hay ninguna seguridad de que los denominados productos milagro cumplan con la función correctora o terapéutica que anuncian.
- Los medicamentos (con y sin receta) solo se pueden dispensar en las Oficinas de Farmacia. Hay que denunciar cualquier intento decomercialización por otras vías (Internet...)
- Hay que extremar la cautela con los productos que se ofertan en medios de comunicación de masas (radio, TV, catálogos, teléfono, etc.), el componente publicitario es altísimo y la intermediación sanitaria, generalmente nula.
- Hay que tener presente que ante la existencia de una verdadera enfermedad o lesión que precise un tratamiento terapéutico, el empleo de productos milagro puede hacer perder un tiempo precioso que retarde o impida iniciar dicho tratamiento en el momento adecuado.
- Los cosméticos pueden limpiar, mantener o proteger el buen estado de la piel o modificar el aspecto de las partes externas del cuerpo pero nunca pueden atribuirse acciones terapéuticas.
- La frase comercial "de venta en farmacias" no asegura la eficacia del producto.
- No se debe utilizar ningún producto supuestamente beneficioso para la salud sin consultar con el médico o farmacéutico.
- Alguno de estos productos tiene "efecto placebo", que consiste en tomar sustancias inactivas y bajo el convencimiento que tiene virtudes terapéuticas.