La lactosa es el azúcar predominante de la leche. La causa de la intolerancia a la lactosa es la incapacidad del intestino para digerirla y transformarla en sus constituyentes (glucosa y galactosa). Esta incapacidad resulta de la escasez de un enzima (proteína) denominado lactasa, que se produce en el intestino delgado.
Se estima que el 80% de la población mundial sufren intolerancia a la lactosa en mayor o menor grado.
La gente que tiene problemas para digerir la lactosa aprende, probando, qué productos lácteos y en qué cantidad puede tomarlos sin presentar molestias y cuáles deben evitar.
Muchos podrán disfrutar de los productos lácteos en pequeñas cantidades o junto con otros tipos de alimento.
La gravedad de síntomas varía dependiendo de la cantidad de lactosa ingerida y de la tolerancia individual, hay pacientes que con cantidades pequeñas de lactosa pueden presentar síntomas.
El tratamiento: El 70-80% de los pacientes responde a una dieta sin lactosa.
Hay que tener cuidado con los medicamentos(20%) en los que el excipiente contiene lactosa (ver el prospecto),así como con ciertos alimentos preparados que la pueden teneren su composición (algunos embutidos por ejemplo).
La ingesta menor de 240 cc de leche al día suele tolerarse bien.
Alimentación a seguir:
- El yogur y los quesos curados suelen tolerarse mejor.
- En el mercado existen leches bajas en lactosa. La leche de soja se puede tomar con tranquilidad, ya que no contiene lactosa.
- Si se sigue una dieta baja en lácteos, se debe recomendar la toma de calcio para evitar desarrollar osteoporosis.
- Existen alimentos que son ricos en calcio y bajos en lactosa, como por ejemplo vegetales de hoja verde (brécol, coles,acelgas, lechuga) y productos del mar (sobre todo las sardinas en conserva, también el atún y el salmón).
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